Tortillas de maíz

Siempre me ha gustado la cocina internacional. Siento que conociendo la comida de un país puedes llegar a entender muy bien su cultura y su gente. Soy una enamorada de la delicadeza de la cocina japonesa, la intensidad de la comida india, el dulzor agrio que reina en los platos chinos, la explosión de sabores de las preparaciones árabes,… y, recientemente, he tenido un flechazo con México y su comida.

Fue amor a primer bocado. Y eso que la cocina mexicana, no me preguntes por qué, nunca me había llamado mucho la atención. Pero fue probar los tacos y caí rendida a sus pies. Ya no había nada que hacer. Desde entonces me he hecho adepta de la comida mexicana y, poco a poco, he ido incorporando sus influencias a mi cocina.

Hace un par de semanas descubri en Youtube una receta de tortillas de maíz y me dije que la tenía que probar sí o sí. Me pareció bastante sencillo así que me lancé esa misma noche. Quedaron riquísimas y triunfaron entre la familia, así que desde entonces las hago bastante a menudo. ¡Estoy enganchada! Me encantan porque se hacen en un periquete y quedan riquísimas rellenas de lo que sea. Con los tacos es cuestión de dejar volar la imaginación y probar combinaciones. ¡Y no hay cosa que más me guste!

Así que si a vosotros también os gusta la buena comida Mexicana, os animo a que probéis a hacer estas tortillas. Os prometo que no os decepcionaran. Atentos, que voy:

Ingredientes

Harina de maíz (1 medida)

Agua (1 medida y media)

Sal

Y, como no, ambientemos la tarde de cocina con un poco de música:

Paso a paso:

Antes de nada, aclaro algo que seguramente os estaréis preguntando. ¿Es lo mismo Maizena que Harina de Maíz? La respuesta es: no. La Maizena es un producto mucho más refinado. Se extrae solamente del grano del maíz, desechando el endospermo y cuando la mezclamos con el agua, en lugar de formar una pasta, se disuelve. Debéis utilizar harina de maíz que utilice el 100% del grano, da lo mismo si es maíz regular o amarillo. Yo utilizo la Maseca porque la venden en el Corte Inglés y la encuentro siempre fácilmente, pero podéis utilizar la que más os guste mientras cumpla los requisitos que os he explicado.

Ahora sí, podemos empezar: en un bowl, introducimos la harina y una pizca de sal, mezclamos bien. A continuación, vertemos una medida de agua por cada medida de harina y amasamos. No es necesario trabajar mucho la masa, siemplemente hay que conseguir que se integre bien el agua. Si vemos que la masa queda seca, añadimos agua poco a poco hasta un maximo de una medida y media de agua por cada medida de harina. Cuando lo tengamos bien mezclado, dejamos reposar unos 20 minutos.

Una vez la masa haya reposado, hacemos pequeñas bolitas (del tamaño de un huevo, más o menos) y las amasamos para que queden redondas. Luego, vamos aplastando las bolas una a una de la siguiente manera: colocamos la bola entre 2 trozos de plástico (podéis coger una bolsa zip y abrirla con tijeras para partirla en 2 mitades), ponemos peso encima (una fuente tipo Pyrex para horno funciona bien) y presionamos hasta que quede una masa de aproximadamente 1-2 mm de grosor.

Ahora sólo queda cocer las tortillas. Las pondremos en una plancha o una sartén (sin aceite) y dejamos que cuezan unos 50 segundos por cada lado, hasta que se hinchen ligeramente y queden doraditas.

¡Y ya está! Fácil, fácil y rapidísimo. Tenemos unas tortillas mexicanas de infarto para rellenar con lo que más nos guste. Os propongo guacamole, tartar de atún (cortáis el atún a taquitos y lo marináis con algo de soja y gengibre) y cebolla crujiente; ¡está para chuparse los dedos!

Leave a comment

Create a website or blog at WordPress.com

Up ↑